Ya no me importa que, sea de noche o día.
Los minutos, siguen sus rumbos, sin avisar.
Yo, pacientemente, te aguardaré vida mía.
Nunca me rindo, cuando me decido a amar.
**-**
He visto, mi viejo álbum, mientras te espero.
Dios quiera que hoy, el tiempo, nos alcance.
Me muero, por verte y, por ahora, desespero.
Hemos fallado y, hoy deseo, hallar el balance.
**-**
No negaré qué, el eco de tu voz, me desarma.
Hoy, estoy acá, acariciando tu cara y tu alma.
No lo niego, esas miradas tuyas, son tú arma.
No iré a ninguna parte, te esperaré, en calma.
**-**
¡No lo niego, vivo soñando despierta contigo.
Sin embargo, no importa qué seas, sólo amigo!