Rick Robles

Nunca Sera!

En el calor del sol de nuestros días,
arden los deseos de mi pasión,
devorando mis fútiles esfuerzos.

 

Palabras atrapadas en los anhelos,
un mudo que no puede decir lo que siente,
donde el corazón palpita incontrolable.

 

Vivo de las migajas cuando te veo,
pasas cerca dejando tu aroma de mujer,
y los sueños fecundan lo imposible.

 

Tu caminar de mariposa,
tu sonrisa embriagante,
más fuerte que el vino añejo.

Mi alma clama por la cuenca de tus pechos,
donde los dolores de la vida sepultaría,
entre las caricias de tus manos que calman la sed de mi corazón.

 

Son sueños que no tienen futuro,
yo no existo en tu mundo,
reflejos del alma que no miras.

 

Ignoras a un astro brillante
que camina anhelando tus caricias,
lejano a tus pupilas.

 

Vivo de un imposible,
pensando que un día sea posible,
ingenuamente lloro por tu corazón.

 

Mi mal no tiene remedio,
hechizado fatal por tus labios,
celoso del viento que roza tu piel.

 

Soñando que un día puedas ver
más allá de lo imposible.