De la rima consonante el lobo nada cruel.
Vuelta a la poesía digo yo, que se escriba,
al menos, bien, el poeta ha de ser... fiel,
y yo lo sigo para que al menos, el verso, viva.
El poeta a lo fatal ha de ser buen infiel,
porque el poema, el buen poema, en definitiva,
nunca muere porque en realidad se deja la piel
en ello, y para el lector, tiene que ser atractiva.
¡Oh, Poesía!. Como la juventud, precioso tesoro,
has de ser lechuga verde fresca, como la primavera,
plena vida... salvas vidas como flor de decoro:
canción de otoño, con una princesa verdadera.
¡Oh. Poesía!. Ojalá nunca llegue tu deterioro,
nunca, y conquistes cada corazón como compañera.
Abril 2.025
NACHO REY