Franjablanca

Soneto borrado

Voy a tener que esquivar al destino:

podría dispararle a mi utopía

y no quisiera estar allí ese día

en que él ponga a prueba su mal tino.

 

Será mejor un cambio repentino

de némesis, de nombre y de osadía,

y pienso concederme la amnistía

en todos los tropiezos del camino.

 

Si alguien te pregunta si me has visto,

responde simplemente que no existo;

de hecho, ya no estoy, te lo prometo.

 

Le escribiré de noche a las estrellas

y bailaré en el mar con todas ellas.

Recuérdame que borre este soneto.