Lucía gómez

INFINITAMENTE POSIBLES...

La infancia, es esa puesta de sol

que no se olvida.

La infancia no se va,

solo se esconde en los rincones.

Vive, en el sabor de una fruta

que se muerde a escondidas;

en la risa que se escapa sin pedir permiso.

Es correr sin razón, dormir sin miedo,

creer sin tener pruebas.

La infancia se mide en asombros,

en rodillas raspadas, en miradas

sin malicia.

Cuando somos adultos, volvemos

por un instante a ser pequeños.

Seres, infinitamente posibles.

L.G.