Muero cediendo a un instante
Tengo en la memoria haber dicho de esas cadenas que me abrazan
Lucían expuestas
Colgadas como serpentinas o carne en los mercados
La vida me dice de este momento
Mi cuerpo luchando por exponerme al fuego y al frío
Mi ceño alucinado invocando alquimia
Cuánto de todo esto es merecido
No interesa siblos días se convirtieron en faltos de horas
No puedo seguir exponiendo mi mano y mi mente al hielo y al fuego
Cristales triturados en una atmósfera de supervivencia
Qué amor puede nacer de allí
Una desesperación ansía mis límites
Soy capaz de eso por ser humano con dermis y médula
Me pierdo entre lo mínimo y lo máximo
Siguen las puertas abriénsose y cerrándose
Esta mirada que calcula de qué me sirve
Cometas y banderas blandiéndose en mi nombre
Fui invitado a destruir estos ídolos
Mi olvido es condena y el trato su represalia
Busca la voz justificar su grito
Soy parte de una creación inspirada en el niño
Cómo es que aprendí a callar y a hablar
Este ladrillo y muro sólido
Solo resiste y es soporte conforme a su estructura
No hace falta hablar de jaulas
Mi cuerpo se consume entre elementos