alicia perez hernandez

ES UNA FALACIA...

ES UNA FALACIA...

Así como pude amarte tanto

...Hoy puedo olvidarte!!

Me sujeto hoy, a lo que siento,

Ayer te amaba con el alma

y hoy sin dudar... diré,

Diré que de ti no me acuerdo

... Y ni me quiero acordar...

Antes eras mi respiración

Antes eras el amor de mi vida

Antes eras mi día y mi noche

y mi dulce amanecer.

Ah! pero decir que no te amo.

es mentirme y mentirte,

es engañarme a mí misma.

¡Tanto, que ni yo me lo creo!

Es una falacia...

yo la inventé para salir de tu vida.

Quiero que no te des cuenta por ahora

¡De cuánto te amo todavía!

No quiero que sepas que mi corazón

sigue siendo tuyo, tuyo y de nadie más!!

Sepas que mi alma sigue unida a la tuya

que me vives y te vivo, vivo en ti y tú mí.

Te siento y me sientes en cada despertar,

si! sigo allí; sigues aquí, tan cerca de mí.

Eres tan de mí y yo soy tan de ti,

para disfrutarnos a pesar de la distancia,

para amarnos, aunque no estemos juntos.

Es una falacia decir que no te amo,

cuando sabes bien qué te llevó dentro de  mí.

Esa mentira dónde repito que repito no te amo,

...nadie la cree, ni tú, porque eres tan mío,

y nunca dejarás de serlo.

Es condena o bendición seguir amándonos, 

por siglos de los siglos amén, Dios lo dispuso así. 

Ni siquiera creo que algún día nos dejemos de amar.

¡Eres el amor de mi vida, eres hermoso, amor!

Siempre tuya, siempre mío, ojos míos de mi querer!!

ERES FÁCIL DE AMAR Y DIFÍCIL DE OLVIDAR. 

 

Alicia Pérez Hernández...México

No es la pluma la que escribe, es el alma

Todos los derechos reservados©

Puedes irte y no importa, pues te quedas conmigo
como queda un perfume donde había una flor.
Tú sabes que te quiero, pero no te lo digo;
y yo sé que eres mía, sin ser mío tu amor.

La vida nos acerca y la vez nos separa,
como el día y la noche en el amanecer...
Mi corazón sediento ansía tu agua clara,
pero es un agua ajena que no debo beber...

Por eso puedes irte, porque, aunque no te sigo,
nunca te vas del todo, como una cicatriz;
y mi alma es como un surco cuando se corta el trigo,
pues al perder la espiga retiene la raíz.

Tu amor es como un río, que parece más hondo,
inexplicablemente, cuando el agua se va.
Y yo estoy en la orilla, pero mirando al fondo,
pues tu amor y la muerte tienen un más allá.

Para un deseo así, toda la vida es poca;
toda la vida es poca para un ensueño así...
Pensando en ti, esta noche, yo besaré otra boca;
y tú estarás con otro... ¡pero pensando en mí!

POEMA DEL AMOR AJENO POETA José Ángel Buesa