Me fui, sin querer irme.
Ahora, ¿cómo desaprendo?
¿Cómo me desprendo
de toda tu influencia?
Quisiera que me pidieras
haberme quedado,
que tan solo insistieras,
que no me hayas olvidado
como promesas traicioneras.
Quiero tu insistencia,
no tu silencio,
como si fuera sentencia
el precio de tu desprecio.
Búscame en los detalles,
en esas canciones.
Dime que no fui un simple desliz.
Imploro: no me falles.
Dame respuestas,
no más razones
para este corazón infeliz.
Por Ximena Rodelas.