Lourdes Aguilar

10 DE MAYO

Observando en las alturas las estrellas

Como miran las chispas las hormigas

En este día busco tus ojos entre ellas

y tus brazos que me acunen como al inicio

Cuánto hubiera deseado esas caricias

En los momentos más cruciales de mi vida

El tiempo mío también se agota y medito

En tantos miedos y yerros repetidos

 

Mujer que de tu carne me formaste

Mujer cuya entrega pasó inadvertida

Mujer de cera y lágrimas fuiste madre

De cuyo dolor deseo verte redimida

 

Te agradezco por lo bueno recibido

por lo que no pudiste lo comprendo

en el mismo cauce turbio y violento

no hallamos un remanso donde asentara

aquello que traía nuestra alma atribulada

pero hijas somos de un tiempo y una historia

Dios te guarde por siempre en su reino

Es mi plegaria en este día madrecita