Este lucero
tan pequeñito
cuida a mi corazón;
este niñito
tan bonito
brilla en la habitación.
Lucerito, lucero de mi amor,
duerme, duerme,
que la noche cesa,
ante la llama que
nunca se apagará.
Duerme, duerme,
que mi corazón
nunca te dejará.