Mi azul... Sé que puede ser complicado entender mis letras retorcidas y melancólicas hablando de amor; pues estoy confiscado con tus cuantitativas y armónicas formas de ser.
Azul como el extenso mar que nos separa, cuya marea no nos deja vernos en su tranquilidad fría.
Azul como el cielo que compartimos cada noche con estrellas que conectan con nuestros día a día.
Mi azul es especial, tengo que verle con cuidado para no asustarlo, tengo que tocarle fuerte para que se calme, tengo que acostumbrar mi corazón a mi azul para qué sea mío.
Mi azul que piensa de si mismo cosas indescriptibles desde el día que suprimió.
Joyas negras adornan su piel, son lunares tan bellos tan él.
Antiguo el sentimiento que encontró que sin querer nos estabilizó.
Kukri, la arma con la que es fácil terminar igual que con un beso tuyo.
Eres mi azul.
Aquel que no sale de mi cabeza.