Pobre alma, que quisiste tener
en tus manos.. tanta fortuna
y te engañas de nuevo, otra vez
queriendo sacar de ti, tantas dudas.
Pobre ilusión¡ de ser confiado
y matas presagios que claman al cielo
creyendo que son ilusión a tu anhelo,
y cobras desprecio en forma de pago.
Pobre poeta¡ que está ilusionado
que vive en un mundo tan mal elegido,
y quiere mostrar que a poco escribiendo
consigue sumar a nuevos amigos.
Y lanza al aire sus trampas y retos
en frases y letras sin ser enemigo,
y sufre el martirio de una respuesta
que lleva el silencio de todos, escrito
Pobre mortal¡ que está en decadencia
que intenta vivir sus horas de sueño,
y a poco que manda de nuevo su reto
recibe de todos.. ninguna respuesta.
Excusa a la vida que no tiene culpa
por ser de la muerte, triste mensajera
y el tiempo lo pasa ahogando sus penas,
bebiendo el alcohol que da la escritura.
Pobre infeliz¡ que nadie te entiende
que quiere escribir, por no estar callado
y son sus intentos los falsos esclavos
de tantos que leen.. y olvidan su paso.
Que solo escribiendo tan solo, pretende
que en tal desazón, no acabe su vida
y estando tan solo... escribe poesía
a cambio de estar, lejos de la muerte.
Pobre infeliz¡ que escribe poemas
y grita al portal buscando esperanza,
y a cambio le dan... por sola respuesta
silencios y mas, de todos y nada.
Y sufre mi cuerpo el duro desprecio
de tantos que miran, y no dicen nada
que el pobre poeta recoge palabras
que puso en el aire, lanzadas al viento.
Y suenan las risas de todos aquellos
que siempre tuvieron sus lenguas calladas,
y fueron verdugos matando los versos
y fueron mis retos, poesía olvidada.
Pobre de ti¡ que nadie te escucha
y pierdes así, de nuevo tus fuerzas
creyendo que existen algunos poetas
que siguen aquí, perdiendo su lucha.
¿Qué darle a mi alma? y cual, es la cura
a tal soledad, que vivo en silencio
si tantos te oyen y nadie te escucha
prefieren ser sordos y a veces ser ciegos.
Ay¡ pobre de mi que solo me encuentro
y son en mis sueños los dueños, fantasmas
que van a escribir y no dicen nada,
y dan por respuesta el mudo silencio.
Pobre poeta¡ que clamas al cielo
y tienes respuesta de nuevo, negada
recoge palabras que forman tus versos
e intenta buscar, quien quiera escucharlas.