Tú piel huele a flores frescas, también a canela y miel, violentas y frutas de Primavera .
Tú boca chilla implora desea arde y pide lujuria a mi boca.
Dame tu saliva en mi saliva que sabe a pétalos de rosas rojas.
Sabes a lluvia a pan recién hecho a frutas de un bosque encantado tú néctar es puro deseo.
Solo hay dos cosas que no podemos controlar.
El amor y la muerte.
Mael Lorens
Mayo 2025