Carlos Eduardo

Este poema no es un poema

 

Es un grito de desesperación,

un aullido del alma,

un estruendo del corazón,

una llama de mis ojos.

 

Me he dado cuenta,

del por qué del fracaso

de las revoluciones,

de las filosofías,

de las ideologías,

de las religiones.

 

Fracasó la revolución china,

la revolución rusa,

y toda otra revolución;

el cristianismo

y las demás religiones

La razón, las creencias,

ninguna influencia tienen

para obtener el bienestar social e individual;

 

la cultura evoluciona,

las especies modifican su genética,

ahí está el fundamento

del desarrollo.