Vicecristo, vuestro ser ha sido elegido
por aquellos divinos cuerpos habitantes,
y en los ardidos insomnes protestantes
emerge ansioso el ser redimido;
mas nunca vuestro amor será vencido.
pues vuestra sagrada voz incesante,
acabará con el Anticristo arrogante,
y el fervor de su fuego será extinguido.
Ser que todo lo alto ha glorificado,
esencia que, enamorada, fiel espera,
resguardaras la ley del Dios nombrado.
Y vuestra ánima será tan justiciera,
que con todo el mal habrá acabado,
bendecido seas, más blanca esfera.