Hoy soporto la agonía del último beso,
hoy prefiero una flor marchita,
sabiendo de flores frescas que otras manos reciben..
Hoy sólo pido que tu ser resucite,
de esta muerte que siento en lo profundo de mis entrañas.
Hoy descubro lo inmensamente débil que me siento, ante lo indescriptible de este sentimiento.
Hoy pienso y pienso..
más no puedo sacarte de mis huesos.
Y me hago una pregunta: porqué me dijiste adiós tras esa puerta?
no te veo, no te encuentro..
Sólo supe que mientras dormia,
tus manos no acariciaban mi cuerpo,
sino tan solo mi alma herida..