Nadie entiende que si escribo
no lo hago por ganar,
pero el día que no rimo
siento que es día perdido
si no puedo publicar.
Si mi mente la relajo
y el corazón no lo fuerzo,
solo soy entre los versos
otro poeta de tantos.
Por eso escribo a diario
sin pretensión o interés
de ganar en los poemarios.
Por eso me puedes ver
y lo que escribo lo sangro
y lo mancho en el papel.