Ahi ibamos ambos , como buen quijotes amasando hazañas propias
No hubo ningún cruel encanto destellante del sol hacia nuestro pesar
Ni siquiera un encuentro donde los cálices de la flor fuese regados
Por el agua cristalina de nuestras risas
Un cálido abrazo de despedida desesperanzaba un encuentro nuevo
Desde ahí , frente al sol escondido tras las nubes , un último encuentro se vivió
La despedida aún continuaba después en nuestros mensajes más no en aquella hazañas gloriosas
que nunca nadie jamás ha vivido , desde creer que la suave capa de neblina era un portal mágico
hasta estar seguros de que las bandadas de palomas esperan aún su encuentro con la luna
La luna descansa en el cielo y la noche vela
Como un serafín de aureolas doradas portando espada brillante
Desde la torre de marfil aquel viejo amigo escribe recordando a su antiguo compañero de expediciones
Nunca se repetirá lo que fue , pero quizás , solo quizás ,en una noche donde las canoas surquen la laguna
En su mente aparecerá aquellos momentos y , las palomas encontrarán por fin la luz lunar.