El Rostro del Amor.
El amor no es solo un beso o un abrazo,
es la brisa suave que acaricia el paso,
es el cielo abierto en un atardecer,
es la luz que guía sin hacerte ver.
Está en la risa que un niño regala,
en la mano firme que nunca te falla,
en la madre que espera con fe inquebrantable,
en el padre que calla, pero ama incansable.
Lo hallas en el canto del ave al volar,
en el sol que despierta al mundo al brillar,
en la flor que renace tras lluvia y dolor,
en el alma que espera sin miedo al amor.
El amor está vivo en cada rincón,
en la simple palabra, en cada canción,
en la vida que fluye sin pausa, sin prisa,
en los ojos que miran con tierna sonrisa.
Y qué bendición tan profunda y real,
saber que el amor es fuerza vital,
que nos mueve, nos sana, nos hace creer,
nos invita a soñar, a volver a nacer.
Porque cuando es sincero y se entrega sin fin,
el amor se convierte en un dulce jardín,
donde cada latido es una bendición,
y vivir se transforma en pura oración.
Nelson Aburto Alemán.
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