Nos vamos hacia adentro
en lo que no es vida,
nos vemos reflejados
en las esfinges y colosos,
en la piedra que resulta
ser la imagen de poderosas criaturas
y nos vamos creciendo
entre pirámides y bustos,
entre corrientes cálidas de aire
y es que la luz se apaga
y se ciega la vista
y es que recurrimos a las cirios/velas
y a la radio
para encontrar respuestas,
ya un barco navega por un río
domesticado el Nilo,
ya un papiro nos habla
de hermosas historias
tejidas entre rotos tejidos de algodón y seda,
que sirven para embalsar,
no se si poemas
o faraones
o la simple gloria y grandeza,
del alma de los seres humanos,
esa que no se compra
pues en ella es virginal y eterna la belleza