En la cocina donde el tiempo se para,
entre jaleas dulces y aroma que ampara,
se coció nuestro amor, tierno y sincero,
un beso con sabor dulce y verdadero.
Manjares y golosinas no saben igual,
cuando el beso es pacto, un lazo especial,
tu boca y la mía, mezcla perfecta,
en ese instante el mundo se conecta.
Dulce niña, mi sol, Dunia de los Ángeles,
tu amor es la miel que endulza mis ángeles,
gracias por sellar con beso divino,
un lazo eterno, un claro destino.
Lo que ayer fue quimera, hoy es realidad,
un beso cocido en pura verdad,
en la cocina de sueños y querer,
nuestro amor es miel que no va a perder.
Donde el tiempo se funde y el alma se siente,
se cuece un beso dulce, aroma presente,
entre risas y jaleas, calor y pasión,
nace un beso tierno, pura emoción.
Sabor a manjar que en labios se esconde,
dulce llama viva que el pecho responde,
ese beso es pacto, sueño hecho miel,
instante eterno, suspiro fiel.
Entre sabores y caricias se une el querer,
beso que sabe a todo lo que es placer,
cocido en la magia de hogar y latir,
un beso que invita para siempre a seguir.