Moneda Que Mueve Al Mundo
Dicen que el dinero todo lo compra,
hasta el pudor en rebaja y la fe hipotecada;
hay quien se vende al mejor postor,
y entrega el alma con factura… sin garantía firmada.
Le llaman éxito si lo alcanzas,
aunque pierdas la risa, la calma… y las ganas.
Te da acceso a tronos sin respaldar,
y te aplauden… por lo que ocultas, no por lo que fuiste feliz.
Abre puertas, sí…
pero no las del alma;
te da lujos, pero no descanso,
y no hay oro que cure un final mortal.
Compras democracia,
se lava para blanquear su mapa,
y la patria se subasta en módicas cuotas
mientras los votos huelen a amaño sobornado.
Hay quienes lo rezan como a un dios en fuga,
lo siguen en cifras, lo besan en bancos,
y olvidan que la tumba más cara del mundo
también se llena de tierra y gusanos blancos.
Yo prefiero mi pobreza con insomnio de ideas,
a su riqueza con alma prestada con intereses al capital,
porque hay monedas que no valen su peso…
y billetes que sangran bajo cada almohada.
Y si me dan a elegir entre el lujo sin alma
o una conciencia limpia y sueño restaurador…
elijo dormir en paz, sin remordimientos,
aunque el colchón no esté forrado con dólares y mi casero esté tocando mi puerta.