Dice que se le llena el alma de calma, que flota como hada desorientada.
Que a los bordes del lagrimal se le forman alas.
Baila con las polillas para hacerse amar y desorienta tarados por ansiedad.
¡Vaya, pero que pintoresca dama!.
Preciosa sin igual, pero sigue estando tan vacía que solo prefiere danzar.