Jaculatoria
Impetra corazón la realidad
de aquello que se ufana en la sapiencia,
jactando desbordada cual creencia,
a ver si es inaudita la verdad.
Increpa la hecatombe de la edad,
colige lo anodino, la falencia
y extirpa al corolario, vehemencia,
tal vez y así se ultima la maldad.
Impela corazón las maravillas;
las simples, las pequeñas, las sencillas
y deja en el buró todo el sentir.
Imposta con aroma las albricias,
por índole de besos y caricias,
derruye la costumbre de mentir.
Samuel Dixon