Es una trilla o un cordel
entre el odio y el amor
que se estira... amanecer.
Has de buscarme por las noches
(Musa)
y llevarme a barracas de licores
refugios de extranjeros
que siguen rutas sin puertos.
Claro que el mundo es extenso
pero no hay espacio para nosotros.
¡Heme aquí!
Atrincherado ante las ráfagas del ego y el deseo,
nunca me he sentido absorto con tanto,
acostumbrado a tan poco,
el vacío siempre fue paz,
aún sigo caminando despacio inmaculado,
estoy llegando, ¿A qué?
no lo sé.
Aunque llegando.