Todo el que va a dormir
se entrega en brazos de morfeo,
pero yo jamás lo haría
porque es demasiado feo.
Cuando yo voy a dormir
aunque nadie me lo crea,
yo me entrego a su mujer
a la que llaman morfea.
Desde que duermo con ella
lo hago con mucho agrado
y hay días que me despierto
sintiendo que está a mi lado.
Aquellos que sufren de insomnio
no pueden dormir y les creo
y solo se podrán curar
si no duermen con morfeo.
En cambio yo soy feliz
durmiendo con la morfea
y si morfeo está celoso
tendremos una pelea.
Los que duermen con morfeo
duerman sin pensar en nada,
que yo seguiré durmiendo
con morfea que es mi amada.
Alejandro Díaz Quero
Villa de Cura,27/04/2025.