RICARDO V

Hay caminos en la mar

¿Capitán, hay caminos en la mar?

 

La mar se duerme y despierta

al compás de algún misterio.

Las proas sienten su fuerza,

su calma roza a los sueños.

 

La mar sostiene el aliento

de quien navegue en su suerte

y siempre acuden recuerdos

cuando su abrazo es de muerte.

 

La mar nos mece en engaño

como el amor hace a veces,

quimeras construyen barcos

sin timón ni timoneles.

 

La mar se viste de espejo

tendiendo su mano al mundo

y si te atrapa el reflejo

se lo lleva a lo profundo.

 

La mar es un orbe inquieto

que se calma y se enfurece

y el faro que cuida el puerto

con su luz hace de puente.

 

La mar por inmensa es grande,

y por secreta es oscura,

como el amor cuando nace

y emprende su singladura.

 

Una vez enamorado,

¿cuál es mi rumbo y sentido?,

si en el mar soy un soldado

indefenso y aturdido.

 

¡Sólo veo el horizonte!

¿Por dónde voy capitán?

y el capitán me responde:

\"por los caminos del mar\".