Amaia.

¡¡Me enamoré!!

¡¡Me enamoré!!

 

 

Sin querer  ¡¡me enamoré!! de él, de su alma, de su mirada, de su sonrisa y de su poesía.

 

Ahora lo extraño, todo el tiempo deseo saber de él y me hace tanta falta, pero me da vergüenza que él lo sepa.

 

Pero aquí lo escribo por si un día él lo lee, y con suerte descubre ¡¡quién soy!!,  y se acuerda de mi, de mi nombre y de mi patria.

 

Pienso mucho en él, le extraño y para mí escribirlo es un poco como tenerlo a él, aunque él a mi no me tenga, aunque él a mi no me quiera.

 

Aunque él no me recuerde y aunque él no sepa de mi, de mi amor, ni de mi existencia.

 

 

Amaia.