Te recuerdo en mis sueños, te recuerdo durmiendo. En mis noches en vela y en abrazos sin cuerpo.
Te recuerdo de día, bajo el alero del cielo y por la noche desnuda bajo la luz de un lucero.
Te recuerdo siempre, siempre sonriendo e insinuando caricias y llenando silencios.
Te recuerdo en abril y pasar del tiempo te hace cándida y viva como el agua de un beso.