Cuando pienso en alguien que me hace feliz, siempre pienso en ella.
Cuando pienso en alguien a quien quiero hacer feliz, siempre pienso en ella.
Cuando pienso en mi futuro junto a alguien, siempre pienso en ella.
Cuando pienso en un hijo, siempre pienso en ella.
Simplemente, ella siempre está en mis pensamientos, aunque yo no esté en los de ella.