Andrik Navarrete Arias

Un romántico

¿Qué quieren de , 
mis tristezas invisibles? 
¿Acaso creen que la ciencia es capaz  
de inventar un valle de metales inamovibles? 
¿Cuando ya existían valles de piedras vivas? 
¿Cuando aún duermen los dioses bajo el valle? 
 
He llorado, pero seguí escuchando; 
me he dejado llevar por el viento 
que bien enferma, 
así como asfixia. 
Pero siempre habrá premio para
los que gocen de creer 
y ver tras su velo, el rostro más bello: 
¡La gran diosa Tierra!