vereluna

Comenzar lo deseado

 

 

Ahora estoy recordando,

aquella  noche lluviosa

en que nos fuimos amando

y fue una noche ¡preciosa!

 

Porque por primera vez

tú y yo nos entregamos

y no tuvimos revés,

porque los dos nos gustamos,

 

de una forma sorprendente

y al nuestros cuerpos rozarse

sentimos, que de repente

no querían separarse.

 

Porque se sentían unidos,

por la química excelente,

que nos había prendido,

al amarnos plenamente,

 

porque al  tú y yo conocernos

y mirarnos a los ojos,

nos atrajimos al vernos

y nos llenamos de antojos,

 

de conocernos mejor,

porque quedamos prendados

y tuvimos el valor,

de comenzar lo deseado.



Vero