Quiero ser el que nunca olvida tus cumpleaños,
el que te sorprenda en cada aniversario.
Quiero ser el hombre que te haga sudar en la cama,
y el café que te recargue todas las mañanas.
Quiero ser quien arrulle y proteja tus alas,
verte volar muy alto, como las águilas.
Quiero ser el que te acompañe a la iglesia
y ser el borrador de tus tristezas.
Quiero ser el sol que ilumine tus días.
El que cumpla tus fantasías;
El que te escriba poesía…
Quiero ser, el hombre de tu vida.
A todo pulmón te cantaré;
Siempre te respetaré, siempre te consentiré,
mi hermosa flor de jazmín.
Mi amor por ti no tiene fin.