Leonel Arias

Oración Purificadora

Mi orgullo me impide volver a sentirme triste otra vez.

Porque soy fuerte, porque valgo mucho, más de lo que nadie imagina.

Porque a mí nadie más me podrá volver a hacer daño, no volveré a llorar por las noches, no volveré a entregar mi vida, porque mi vida es sólo mía. Nunca más me sentiré solo. No me volveré a acostumbrar al cariño de una persona, porque no le necesito. Me haré querer, me haré respetar, haré que se te remueva la conciencia, para que luego seas tu quien me busque.

 

No volveré a caer en ese pozo, no me lo puedo permitir otra vez, mi tiempo en la tierra es muy valioso. No me robarán otra vez la sonrisa, no me volveré a enamorar, porque ya aprendí que tarde o temprano duele, no me volveré a sentir inferior que nadie, ni volveré a compararme. Soy como soy, soy único, no dejaré que la historia se repita, no pensaré en ti, no dependeré de ti.

 

No escucharé lo que me digas, ni me creeré tus promesas. Soy invencible, tengo el corazón blindado, a prueba de traiciones y mentiras. No sufriré, no me rodeare de tus recuerdos, no me lamentaré por ti, no te echaré de menos. No se reirán de mí, ni jugarán conmigo. No podrán conmigo, seré feliz, porque me lo merezco, y porque me da la gana. No derramare ni una sola lágrima, no me derrumbaré, no sentiré más dolor, no me invadirá la pena, ni sentiré angustia.

 

No me amargarás la vida. No me comeré la cabeza buscando una solución, ni me preguntaré porqué me dejas. No me sentiré culpable de nuevo, la culpa es sólo tuya. No te pierdo yo a ti, me pierdes tú a mí, porque a mí no se me deja.

 

Ya no soy aquel ingenuo e inocente niño, a ese lo olvidé y lo eché hace tiempo de mi vida, porque la odio, porque ya no soy tan débil, porque se luchar y no rendirme. Demostraré que he cambiado. No me dejaré llevar por los sentimientos nunca más.

 

Soy frio, soy de piedra. No te esperaré, ya me cansé de quedarme sentado y confiar en el tiempo que a veces se equivoca. Siempre me sentiré seguro de mi mismo. No cometeré otra vez los mismos errores, no entregaré todo a cambio de nada.

 

No volveré a preguntar por ti, ni te nombraré en todas partes, no soñaré contigo, ni sentiré la necesidad de estar a tu lado, no te besaré, no te volvere a tocar ni permitire que tu lo hagas, evitaré la tentación, jamás sabrás realmente si te quiero, si te odio o simplemente te deseo. Ese será mi secreto. No importa lo que digas o lo que hagas. Me repetiré una y otra vez que para mí no significas nada.

 

No me sentiré vacio, ni olvidado. No volveré a dar pena a nadie, porque no dejaré que me vean hundido, ni abatido. No volveré a tener la mirada perdida. No volveré a alejarme de las personas que de verdad me quieren por seguirte a ti o emprender de nuevo la huida.Ya no soy un cobarde, ya no me rindo. Soy valiente y no permitiré que me hieras.

 

Pero a pesar de todo, no me arrepentiré de haber compartido momentos especiales contigo. No te guardaré rencor, no seré yo quien te juzgue, no te demostraré jamás mi decepción o enfado. Seré indiferente, que quizás eso sea lo que más te duela, no dejaré que se rompa nuestra amistad, quiero conservarla y que sea duradera, un pacto para toda la vida. Dejaré todo en manos del destino y si alguna vez vuelvo a dudar y siento que mis fuerzas flaquean o que mi voz se quiebra, te seguiré escribiendo para borrar de mi cualquier sentimiento.