Cubanito

que fácil de enamorar... confesión puntual

Un suspiro llega a ella,

con un brindis de pasión,

aroma que inspira,

a invadir a la razón,

mi pensamiento le llama,

se engaña, piensa que aun ama,

y con un riesgo inseguro,

en peligro cierto estoy,

y le miro, y me digo por dentro,

¿que habré hecho yo, señor?

para morderme los labios,

si la miro a discreción,

para sentirme excitado,

y envenenado de amor,

disfrutando en la ausencia,

un recuerdo acogedor,

que condena a su presencia,

y enseñar volar al tiempo,

y en su cara veo el beso,

que condena al corazón

¿y que hice yo, señor?

otro día le comento ...