Antonio Reina Moreno

¡Qué calor!

¡Qué calor!

 

¿Por qué no remite

este calor sofocante?

Un día y otro se repite,

no descansa ni un instante.

 

¡Agua por favor

que me deshidrato!

No es poca labor

aguantar otro rato.

 

¡Parece que hay mareilla!

Abro la boca y los brazos,

me dejo caer en una silla

busco aire a codazos.

 

¡Qué noches con el ojo abierto!

¡Qué de vueltas en la cama!

Miro la luna despierto

a ver si pasa esta flama.

 

Ya llegará el momento

de quitarnos el bañador,

así, con mucho contento

olvidarnos de este ardor.

 

Antonio Reina Moreno 6/8/2017