Max Hernandez

Dejar ir


Aspiras profundamente y sonríes
Tu sonrisa no te engaña, pues llora el alma
Cierras los ojos y te dejas llevar por el suspiro
Que con violencia estremece tu cuerpo
Te desgarra el pecho, y hace que tu corazón
Llore, en silencio, con amargura

Exhalas. Una nube gris nubla tus sentidos
No puedes más con este sentimiento
Podrías soportar cualquier dolor físico
Pero, por Dios!, cómo duele esto!
Duele de manera indescriptible
Duele tanto que bien quisieras
Que cortaran tu cuerpo en pedazos
Y sacaran tu corazón aún latiendo
Para verlo detenerse por fin, y acabar
Con tan amargos sentimientos

Das el primer paso, dejando atrás 
Todo eso que te carcome por dentro
Eres una carcasa vacía, un maniquí hueco
Que se deja llevar por los elementos
Volteas con tristeza y por última vez
Te deleitas con aquello que 
De manera sublime te devolvió a la vida
Pero que te ha hecho tanto daño
Que ahora solo te lastima

Sonríes, casi como con una mueca
Y das el segundo paso, y el viento
Hace su trabajo, llenando de polvo
Y de olvido todo lo que atrás queda

Sonríes
Vas practicando tu sonrisa
Hueca, sin corazón, sin alma
Pero sonrisa al fin y al cabo
Y te servirá para seguir en este camino
Que muchos llaman vida
Pero que para ti se pinta sólo
Como una triste y solitaria miseria....

Sonríe, poeta! Que en el dolor
También pueden haber letras bellas...
Aunque duelan...