Freddy Kalvo

Luz y sombra

La luz de su interior borró la sombra

aquella que cobijo a mí me daba.

Se fue, se marchitó, con la alborada,

y el viento suave y fresco de las lomas.

 

Su luz del corazón también me toca

y salgo de la noche que recala

los miedos que se alojan en el alma

y caen como lluvia gota a gota.

 

Las noches hoy disfruto más sereno,

se fue el dolor ingrato de mi vida,

limpió lo que por dentro estaba muerto

 

y luego renovó la luz del día

muy dentro de mi ser que estaba yermo

y lleno de las sombras con neblinas.