Siguiendo la estela de mayo,
rema este poeta en el eco de tu silencio,
con mi sueño a contra viento...
Y de mientras, va cayendo la tarde
en el eterno horizonte,
profanando al sol que se consume...
Ya mi reloj se vacía,
y en volandas su misterio se me ahonda,
cuando declina el día...
Al notar su pecho que late,
en mi galope fantasma a su materia,
con el ángel de la noche...
Pues ella, con dios está,
cuando encauzo a vislumbrar su imagen excelsa,
cortando en dos a la muerte que calla...
¡Así, te siento ex mujer mía!
Cuando este fenómeno colmado de rareza,
a mi fantasía hiperboliza...
Comentario de autor: \"Hay ensueños que si no los cuentas no existen\"