Cuento Corto: Un Negrito Bajo la Falda de Mamá
Por: Srta. Zoraya M. Rodríguez Sánchez
Seudónimo: EMYZAG
Había una vez una choza vieja y muy deteriorada. Allí, vive Doña Jacinta y la mujer se halla encinta de un negrito que viene en camino. Cuando a Doña Jacinta le dan las contracciones de parir fueron muy fuerte y cae enredada entre escombros en esa choza vieja. Doña Jacinta sola y en desolación y con contracciones fuertes llega a parir un negrito. El negrito crece y se lleva lo mejor de todo, a una buena madre. Y dice, Doña Jacinta que es un negrito muy lenguaraz y muy perspicuo, el muchachito. Doña Jacinta entre faena y en hacer la comida, el negrito hace de lo suyo. Cuando entre juguetes y más, se enreda el negrito bajo la falda de color negro de Doña Jacinta, y el negrito le dice a su madre, ¿dónde estoy mamá…?, y Doña Jacinta le dice que… -¨muchachito no se esconda debajo de mi falda que no lo puedo ver se confunde con mi falda…¨-. Y el negrito muy lenguaraz y muy perspicuo sigue debajo de la falda de su madre Doña Jacinta.
El alma de Doña Jacinta, una vez se asusta porque el negrito quedó dormido debajo de su falda y no lo pudo ver, se enreda Doña Jacinta con el niño y cae rendida del cansancio allí mismo al lado del negrito. El negrito muy astuto y muy perspicuo va de salida por la puerta de la choza vieja y ve la falda de Doña Jacinta en el tendedero, la toma y se enreda a cobijarse siempre bajo la falda de su madre Doña Jacinta y el negrito se cubre por completo, allí mismo, con la falda de su madre Doña Jacinta y queda más dormido que Doña Jacinta. Y Doña Jacinta cuando despierta no ve al negrito debajo de su falda y lo extraña. Doña Jacinta va en busca de su niño y no lo halla. Mira debajo de su falda y no está el negrito bajo la falda de Doña Jacinta. Doña Jacinta lo escucha llorar y ve al negrito debajo de su falda fuera de la choza vieja. El negrito le dice… -¨mamá, me dormí allí…¨-, y Doña Jacinta le dice que… -¨hijo mío no lo veo debajo de mi falda es del mismo color, salga de ahí…¨- y el negrito nunca lo entendió.
FIN