Gustavo Echegaray

Olvido

Te buscan mis ojos,
hambrientos de tu cuerpo,
como un remolino antiguo
que levanta la arena dormida
y arranca susurros perdidos
en las grietas del tiempo.

Y temo al olvido,
bestia sin rostro,
que arrastra mi mente
hacia aguas sin regreso;
río oscuro que golpea
una y mil veces
el puente lejano
donde tiembla tu recuerdo.