Carlos Justino Caballero

LA ÚLTIMA NOCHE

 

30 de septiembre de 1981

 

 

Terminaba la tarde y él jugaba,

jugaba con ella en sus rodillas...

jugaba con su nieta, la que amaba,

la de la risa y simpatía...

 

Era tan pequeña entonces

que no debe recordarlo.

 

Se levantó luego y me dio un abrazo,

así... como les muestro, amoroso y cálido

y comenzó a subir las escaleras

con la lentitud obligada... mansamente.

Y antes de perderse saludó a todos

con la mano abierta, así... como les muestro.

 

En mi descanso nocturno, inquieta pausa,

me sacudió la llamada álgida.

Presuroso acudí a ella sabiendo que no llegaba

a tiempo a despedirme.

 

Al llegar, dormía con la placidez de su alma

y el silencio de su pecho aturdió mi oído.

Ya se había ido... le dejé mi abrazo...

y mis lágrimas!

 

Así... como les muestro...

 

 

 

 

De mi libro “Del ser de mi existencia”. 2018 ISBN 978-987-4004-71-0