jvnavarro

VIEJOS Y RENACIDOS AMORES

 Ocurre que corre a lo grande
por esta tarde un miura
que a la plaza sale
con esas ganas de los toros con bravío 
de llevarse por delante
las dudas que llevan las nubes
de descargar sus aguas
ahora que el cielo se enciende.
 
Tarde de muchas ilusiones
recogidas en las trenzas
de unas niñas que juegan en un parque.
 
Ya las alondras pasan
se miran ellas en su volar suave
absorbiendo las miradas
de quienes son por aquellas calles 
 solitarios transeúntes.
 
No es nada de lo que uno observa
que sea destacable,
solo son pequeñeces
de esas que sirven
para ir tirando hacia adelante.
 
Y es que ya pasó el otoño,
y en uno hay tristezas tan relucientes
 que si se flotan salen brillantes diamantes.
 
Y es que los otoños ya me arden.
Es que si no llega la primavera
se morirán las rosas y claveles,
en esos jardines los de siempre,
por donde pasean quienes
sin hacer preguntas de las manos 
cogidos se saben llenos por dentro
de viejos y renacidos amores.