Nitsuga Amano

Valiente

Cuando la rendición se asoma, tu presencia es el eco que reverbera,
me insuflas fuerzas para encarar la tormenta, arrancar problemas de raíz.
Un fuego, incandescente, se aviva en mi pecho, alimentando mi voluntad.

 

 

Así, no sucumbiré,
así, la fatiga no hallará morada en mi ser,
así, el sabor de la derrota será ajeno a mi experiencia.

 

 

Me haces sentir fuerte,
como una ola desbordante que todo lo arrasa a su paso.

 

 

Me haces sentir valiente,
eres la fortaleza que se yergue en mis días grises,
la ovación que me incita a levantar la mirada,
eres la razón que me hace sentir imparable.

 

 

Eres la musa que inspira cada paso, cada gesto,
la melodía que entona en la sinfonía de mi existencia.

 

 

Así, con cada latido, con cada suspiro,
contigo, encuentro la fuerza que redibuja mi destino.