OSCAR LUIS GUZMAN

CONFUSIÓN ©

Como errantes confundidos,

tantas veces caminamos por senderas

sin destino; atravesando encrucijadas

y nuestra brújula inepta, implacablemente

nos conduce por rutas embrolladas.

 

Por entre la borrasca imperturbable,

a veces aparece un lucero imperceptible

que nos conduce a un nauseabundo laberinto:

Una ciudad sin sol y sin abrigo…

Ahí, donde los afligidos corazones,

con mentes somnolientas, encuentran su refugio

en un confuso e imaginario paraíso,

alumbrado de una incomprensible realidad...

 

En donde un deshumano emperador

rige, con impreciso cetro;

sin saber discernir la diferencia

entre la pasión y la ilusión

entre la necedad y la razón.

 

Donde abundan los antónimos de la verdad

y se confunde la necesidad con la ambición.

Donde el egoísmo se confunde con la necesidad.

y el libertino posee la libertad

de actuar ileso, según sus apetitos;

y la muerte se encuentra aún estando vivo

y en cada esquina rige la desolación;

pues el odio habita a un paso del amor.

 

*