Rafael Parra Barrios

Afectos corroidos

Sin habitación compartida, 

pasan noches frías, 

coincidimos en el salón,

entre silencios y lejanías, 

vivimos un mundo sin razón,

cargado de alevosías,

al que hay que ponerle corazón.

En un hogar sin amor 

y sin perdón,

no hay honor,

es un frio paredón 

donde la vida muere

por falta de ilusión.

Existencia en el olvido, 

con pena y sin orgullo,

escuchamos ecos

y murmullos, 

en imbuidos pasillos

de afectos corroidos.