Lamar Varela

Cotidiano

Como si Dios me hubiera dejado,

estoy cansado.

Humilde, sin ánimos de ver, de oír,

de vivir en los mares, en las avalanchas, en los ciclones.

Lejos estoy y cerca, 

de los endebles sectores que no se ven,

que no se miran.

Se detiene mi corazón y mira,

se abstiene e inunda, en alguna orilla.