José Ángel Pineda

En el jardín del alma

En el jardín del alma, florece el amor,

donde los ríos son melodías que fluyen.

Los bosques susurran secretos antiguos,

y los lagos son lienzos de azul.

 

Las aves trazan palabras de una canción sin fin,

en un mundo donde la belleza se despliega.

Cada río es un susurro que fluye,

cada bosque una melodía que crece.

 

Cada instante es un misterio, un sueño despierto,

una pasión que arde, un sentimiento abierto.

Soñar despierto es algo serio, una danza en el viento,

un viaje al infinito, un eterno momento.

 

Cada lago es un espejo, reflejando la vida,

cada ave una nota, en la sinfonía compartida.

Donde el amor brota, como una fuente en el jardín,

en el jardín del alma, donde comienza el fin.