Allen Andree

EXPANSIÓN

Que Dios da para todos

En una extensión de mil personas hay cien personas

En ciem personas hay diez y de diez hay una

Y de ese individuo hay un inttervalo entre Dios y la nada

Somos prisioneros de un milagro que mira con su seda al tiempo

Una superficie se recrea en nuestra piel 

Y al otro lado del mundo el miedo se instala en los cobijos

Se impregna en las almohadas

Y las jaurías dejan de ser familia para comvertirse en aullido

Bendecir el día cuando amanecemos inyectados

Cómo amar en estado de putrefacción

Cómo dejarse rasguñar por um versículo

Si no hay fuerzas para mineralizar nuestra voluntad

Frágiles lo somos

Y damos dirección a la libertad como a una flecha

Y en su surco nos encotramos con esa persona

Y en su intervalo no sabemos qué hacer

Quizás consolar su universal condición