Se concentra en tu caudal, intrínseco, 
el ayer y el hoy de torrentes cotidianos,
transitas como río sigiloso 
las cuatro estaciones del tiempo
y no engañas,
no mientes, solo esperas. 
Como no evocar tu nombre
que auspicia sinfonías interminables, 
como predecirte
si descorres con mesura las persianas 
del presente pregonero de sucesos
y nunca mueres, tan solo te renuevas. 
No trocas mis palabras con tu aliento
permitiéndome decir 
que visitas los campos del edén 
a plena noche 
y con diestra parsimonia 
depositas magnolias en los sueños, 
mañanas vírgenes en el alma
asfaltando la urbe de las penas 
haciéndolas transitables
hasta cuando el oráculo se cumpla. 
Me ves transitar y tu tan solo esperas,
inmutable.
Autor……reh